Una mañana tardía

¡Espabílate, marmota! Mira las horas que son y tú saboreándote un mango como si la vida se pudiera esperar toda la vida para que la tomes en serio. ¡Vamos, marmota! (Yo creo que las marmotas han de ser unos animales despaciosos, pesados y torpes porque de otra manera no me habría salido la palabra para […]

LA OBRA E INTERMINABLE

22 El miedo, ay, el miedo. El miedo es una montaña de humo que se nos para enfrente con los puños en la cintura y la íntima esperanza de que la derrumbemos en un lecho de hojas y de paja. Ah, la miedo.

Comida china

Tengo debilidad por la comida china; mas bien, por las cocinas orientales. No hay lugar al que viaje –porque como los orientales son la parte mayoritaria de la humanidad y están extendidos por todo el mundo, no se llega a pueblos ni ciudades en los que no haya representación de tales humanos- que no busque […]

LA OBRA ES INTERMINABLE

21 Con la piel hasta el cuello y encima el desbordamiento, ¿cómo pondré a flote la lascivia que me escuece en silencio, cómo darán de sí esas tibias mariposas?

Anestesia espontánea

Esto no le había pasado nunca y lo sorprende de verdad. Porque desarrollando un criterio normal debería tener causa externa necesariamente y no ser algo espontáneo. Ni nunca ha oído que algo así le ocurra a nadie. Claro que siempre, aunque se vivan muchos años, hay abundantísimas cosas que faltan por ver, el mundo tiene […]

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