Poco antes de venirme a España, Luis Ignacio Villagarcía, en Colima, me hizo un regalo precioso: me dio dos perros de barro que me traje perfectamente empacados. Comenzaron a vivir sus días entre las plantas cercanas a los balcones del salón. Cuyas historias contaré otro día, las de las plantas. Unos perritos muy simpáticos y […]
¡Uf: fiu!
No sólo siento que es una responsabilidad; es un gran gusto. Aparte de publicar mis poemas, que fue el primer impulso, construir en esta página una realidad nueva, en la que valiéndome de todas las argucias posibles hablo con todos. Con todos. Porque la gracia de la construcción literaria es que acaba por ser leída […]
Los doce apóstoles mandan por Tamayo
De todos los juegos en verso que he hecho en mi vida, yo creo que este es el que más me divierte. Me encanta imaginarme a los doce Apóstoles en el más allá, comiendo y abrigados con sus suetercitos de grecas, sin mucha materia que tratar sino más bien aburridos, que discurren mandar a la […]
Los gallos tipográficos
En el sueño parecía sencillísimo, me despierto y lo escribo y así todo el mundo se entera. Pero, claro, ya despierto no tiene pies ni cabeza: habíamos emprendido Milagros y yo un juego muy curioso con los nombres de nuestros personajes, que eran algo así como un gallo y una gallina medievales, muy vistosos. Consistía […]
Toledo en un predicamento
No es esta la época del año adecuada para publicar calaveras pero son lo que sigue en el orden del libro. Las hice hace unos diez años y no recuerdo bien su circunstancia, ya tampoco puede ser nada trascendente, pero tienen el propósito de divertirme y de divertir a otros, además de continuar una tradición […]
Urticaria caperuza
Aprobado con sobresaliente: me desperté a las cuatro y tantas pensando que ya y resignado a ponerme a leer o a lo que fuera, y anda vete, me volví a quedar hasta que la luminosa ascua del día me dijo, ven muchacho, y déjate allí, no te rasques. Si alguno de ustedes quiere recordar uno […]
Responso por la Mancuspia
Había en Monterrey, hace años, una hoja literaria llena de vitalidad y simpatía, que me mandaban con frecuencia. Yo entonces vivía en los esplendores del siglo y el tiempo me era escaso pero procuraba contestar y estar presente. Nunca logré, sin embargo, traspasar los límites de la urbanidad y hacerme cuatarroñas de los mancuspios. Un […]
¡Qué noche!
Ahora sólo quiero dormir, dejar de saber lo que fue la noche: naufragábamos, navegantes, no podía yo controlar la barca de mi adolorido cuerpo; todo era equívoco y tortuoso, punzaba y daba miedo, y no había adónde llegar, no había amanecer ni puerto en perspectiva. Sólo quedaba la profundidad como destino. Yo espero que este […]
Flojito el cuerpo
Aunque ayer dormí a lo largo de todo el día siestas y modorras matutinas y vespertinas, por la noche me quedé profundo como si hubiera estado trabajando en la construcción. Dice Milagros que sonó el teléfono, pero yo, que salto siempre a la primera, no lo oí. Qué bueno. Más me vale aflojar el cuerpo […]
Tu amor
Me habría gustado que hoy tocara uno de esos poemas largos e historiados que llenara toda la página y me dejara ser breve en su introducción, pero no, tocó este pequeñito que, además, no necesita mucha armazón para sostenerse. Así que hoy les quito menos tiempo. A ver mañana. TU AMOR Lo único que yo […]