Me da hipo

Es que me da hipo. Un hipo pertinaz, reiterativo, como todos los hipos. Casi no me doy cuenta cuando comienza, es suave y mullido, con algo de curativo; uno cree que va a ser un espasmo benéfico y liberador y sigue con lo suyo; pero cuando se ha instalado como descarga nerviosa que sacude todo […]

Autocrítica

Hay poemas que no necesitan que se les agregue nada; cualquier intento de explicación es una intromisión grosera. AUTOCRÍTICA El Adán de Tulio Lombardo es un varoncito hermoso de mármol con una hoja de parra. Como yo.

Comienza escribiendo tu búsqueda y pulsa enter para buscar. Presiona ESC para cancelar.

Volver arriba