Sin categoría

Horas de trabajo

HORAS DE TRABAJO

Vuelvo a mi cuerpo
como un ladrón arrepentido
acude al altar de su credo
a demandar entendimiento.

Amigos, favor de ayudarme:
¿En un brutal ascetismo hallaría la inteligencia?
¿Vivo sólo para dejar constancia a nadie
de que aquí hubo dos ojos, una cabeza, un torso,
dos testículos dolientes,
cuatro extremidades flacas
y una boca gritona productora de pasto, de guijarros,
de ásperas mataduras espirituales?
¿Yazgo aquí creyente de que vivo
y sólo soy parte de un botín
hurtado a la nada por invisible mano?
¿Soy yo el crimen perfecto?

Si no es nada de esto
me arrepiento de haber sido solo en la vida,
de haber tenido nombre propio,
de no tener esperanzas.

Estoy a solas con la furia
mientras la tarde cae con olor a claveles
sobre mi pequeña habitación.

Creo claramente que en efecto
soy yo quien mora en este pulpo dormido;
creo que la tierra va a terminar en un estallido
luminoso y total
y creo que salpicará de pequeñas unidades poéticas
al universo;
creo que soy bueno
y que merezco escuchar sus opiniones.

De ahí en fuera no sucede nada:
realizo mi trabajo, rumio mi tiempo,
gano mi dinero, me alimento lo necesario
y no amo a nadie,
ni nunca amé a nadie.

Categoría: Sin categoría
Entradas creadas 980

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Entradas relacionadas

Comienza escribiendo tu búsqueda y pulsa enter para buscar. Presiona ESC para cancelar.

Volver arriba