La dolorosa vaguedad

Pero sobre los hechos campea la voz
y la voz levanta reinos
abre las puertas de ciudades prodigiosas
en las que el tiempo apenas va a nacer
mira si no tu voz en tu llavero

urde hijos la voz que la mantienen
como en cualquier sueño fugaz de embarazada
alza su estanco de amor en cada esquina
como viuda que es
e ilusionada alquila cuartos
para entrenar su perversión a solas

ah qué la voz que se contesta
y teje y teje
una cadena tan pequeña tan pequeña

mira si no tu voz en tu llavero.